Jesús abrió nuevos horizontes a sus discípulos que, al principio, los desconcertaron, pero luego los fascinaron profundamente.
Con Él trabajamos juntos para preparar “nuevos tiempos”
El tiempo es la dimensión con la que nos medimos continuamente. Esperar nuevos tiempos significa desear un cambio que nos lleve a poder acoger cada día en la vida cosas nuevas que aún no conocíamos. Ciertamente existe la expectativa de algo nuevo y bueno. Una expectativa que luego se convierte en esperanza concreta del bien.
Vivimos en una era de cambios rápidos y profundos, es importante aceptar cosas nuevas con el corazón y la mente abiertos.
Los nuevos tiempos pueden desorientarnos. Sin duda son una invitación a crecer y descubrir nuevos horizontes. No vale la pena resistirse al cambio. Aprendamos a aceptar el desafío de crecer juntos, en un mundo en constante evolución.
Jesús abrió nuevos horizontes a sus discípulos que, al principio, los desconcertaron, pero luego los fascinaron profundamente.
Con Él trabajamos juntos para preparar un futuro en el que las nuevas generaciones puedan prosperar en plenitud de vida.
Tenemos ante nosotros un nuevo año que queremos que por fin sea un año de paz para todos los hombres.
Que una Navidad siempre llena de vida nueva nos involucre a todos en la creación de nuevos tiempos.
¡Feliz navidad y próspero año nuevo!